En el norte de Marruecos hay numerosas ciudades y pueblecitos costeros donde pasar unos agradables días disfrutando de sus playas, su gastronomía y sus gentes.

Desde Tanger,importante centro comercial y marítimo, pasando por Tetouan y Martil con todo lujo de veleros y yates a Xaxuen, hermanada con Vejer de la Frontera, agradable localidad situada a los pies de los Tissuka, sus casas blancas y puertas azules así como sus encantadoras callejuelas la convierten en una de las ciudades más bonitas del Rif.

En esta ruta por el norte de Marruecos no podemos perdernos Meknes, una antigua Ciudad Imperial donde sus antiguas murallas, fuentes, caballerizas, almacenes y graneros que recuerdan su pasado ni por supuesto Fez la más antigua y hermosa de las Ciudades Imperiales declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad. La ciudad se parte en dos, FEz El Bali la vieja fundada en el siglo VII y Fez El Jdid la nueva,, creada en el siglo XIII por los Merinies. Recorrido por la Medina y las Madrasas, antiguas escuelas coránicas, hoy en día ocupadas por los alfareros de Fez, el Barrio Judío y el palacio Real. 

Por último Marrakech, centro neurálgico y turístico del país y segunda Ciudad Imperial de Marruecos con numerosos monumentos que visitar como las Tumbas Saadies, la Koutoubia y Palacio El Bahía, el Museo de Marrakech, la Madrassa Ben Youssef, y por supuesto sus inmensos zocos con diferentes aromas; especias para cocinar, colores de madera..., y la legendaria plaza Jamaa El Fna, donde los bailarines y saltimbanquis se mezclan con los encantadores de serpientes para formar la amalgama de Cultura.

El Jadida, antigua Mazagán, fue creada ne 1502 por marinos portugueses que arribaron a las costas marroquíes construyendo un fortín. El Jadida ha conservado bellos vestigios de su pasado, destacan las murallas con 4 bastiones reconstruida en el siglo XIX y la gran cisterna portuguesa. El Jadida es un tranquilo puerto de pescadores especializados en crustáceos.

Essaouira, la Perla del Atlantico, la antigua Mogador, habitada aún por los Gnawa descendientes de los esclavos negros procedentes del Sudán. Es una ciudad muy interesante que ha conservado numerosos vestigios de su pasado.

Ya en la Antigüedad tuvo un importante papel gracias a sus moluscos de los que se extraía la púrpura para teñir las vestiduras de los césares.
Su muralla fortificada, su puerto de pesca, sus casas blancas con los marcos de puertas y ventanas en azul, hacen de Essaouira una ciudad única. 

Destaca en la zona de Essaouira bosques de un árbol llamado ARGAN, exclusivo de esta zona protegida por la UNESCO.Son extremadamente resistentes y se extienden por una superficie de 830.000 ha.

El fruto de este árbol se deseca y se separa de la corteza, se tuesta el fruto y se machaca en un mortero de piedra, donde se obtiene una pasta de la se extrae el aceite, el cual tiene infinidad de propiedades

Con numerosos kilómetros de playa existen infinidad de actividades acuáticas como el kitesurf, windsurf, buceo, piragüas...etc, además de paseos a caballo o en dromedario por las playas vírgenes de Sidi Kaouki.

No se puede hacer un viaje al Marruecos y marcharse sin conocer el auténtico desierto del Sahara: las Grandes Dunas de Erg Chegaga, dunas de hasta 300 metros de altura y una extensión de 40 kms haciendo de frontera natural con Argelia.

En verano es posible visitar el desierto y pasar la noche durmiendo al raso bajo millones y millones de estrellas que casi puedes tocar con tus manos....

En verano se aprovechan también los baños de ARENATERAPIA, propios de la medicina tradicional bereber. Cualquier dolencia, ya sea ósea o muscular, se mitiga con estos baños de arena...

Desde tiempos inmemoriales, las antiguas tribus nómadas ya utilizaban las arenas del Sáhara para paliar sus dolores de espalda, artrosis, reuma,etc...

Hoy en día, muchas familias de Casablanca, Rabat y el norte de Marruecos, pasan una semana de sus vacaciones y realizan el tratamiento para "desestresarse" del ritmo frenético de la gran ciudad.

La ARENOTERAPIA consiste, en enterrar a la persona literalmente en la duna y permanecer entre 15-20 minutos enterrada. Seguidamente se va al hammam y se da un masaje. 

 Además de todo esto, la ARENOTERAPIA, es un buen exfoliante natural.

Valle de Ourika, el pulmón de Marrakech... Nos adentramos en el Atlas, donde aún habitan tribus bereberes. Después de las crecidas torrenciales de 1995, el paisaje ha variado , la carretera, reconstruida, termina en Setti Fatma, a unos 70 kms de Marrakech. En Setti Fatma a 1.500 mts se encuentran las 7 cascadas, la primera cascada está a 1 hr y media de marcha y la última a unas 4 hrs..

Trekking Alto Atlas

También salimos desde Marrakech hacia las montañas del alto Atlas a través de Tahnnaout, Oued Ghighaya y Asni, impresionante vista de los pueblos bereberes a lo largo del valle.

Desde Imlil (65km de Marrakech), se inician los trekkings por el paso Tizi Mzik (2684m), con una vista espectacular sobre el valle de Imlil y la cumbre de Toubkal, seguimos a Tamsoulte donde visitar las cataratas más altas de las montañas del Atlas 100 m de altura), por el valle de Azzaden a través del bosque de enebros para llegar a la aldea de Tizi Oussem, lo hacemos en unas 3 horas de caminata aprox.

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